Paco Heredia es guitarrista flamenco, de Parets del Vallés, con un extenso recorrido y prestigio dentro del mundo flamenco. Artista polifacético, trabaja en proyectos dentro del sector audiovisual, ha dirigido musicalmente obras de teatro como “Las Bodas de Sangre”, películas como “Lola vende ca”, ha trabajado en diversos programas de televisión y ha colaborado con músicos de primer nivel.
Paco Heredia y su banda, presentarán la obra “Lorca, Orgullo Flamenco” dentro del acto de homenaje a Federico García Lorca, organizado por el Casal Popular la República de Mollet del Vallés, el día 20 de noviembre de 2021.
¿Cual es el origen de “Lorca, Orgullo Flamenco”?
Siempre he empatizado con Lorca, desde bien pequeño, Yo nací en 1979 que es cuando Camarón de la Isla grabó “La leyenda del tiempo” que contenía varios poemas de Lorca. En mi infancia, era bastante común que en las conversaciones entre flamencos y gitanos, se hablase de Lorca.
Televisión Española hacía programas nocturnos, con música en directo y me propusieron hacer uno de estos programas, armonizando los poemas de Lorca más populares y así lo hice. Después de componer y grabar los temas, hubo un pleito legal que paralizó el proyecto y la grabación no se emitió. Pasado un tiempo, escuché de nuevo esos temas y pensé en recuperarlos porqué están bien, se hicieron con un trabajo muy intenso y aquí están.
Este trabajo es el que presentaré en la sala Fiveller de Mollet.
Lorca es un personaje singular, de familia acomodada, se interesa por la cultura popular y se enraíza en el pueblo, viajero incansable que siempre vuelve a sus orígenes, fuente de inspiración para artistas de todos los géneros. ¿Qué facetas de Lorca te han llevado a crear este espectáculo?
Lo más inspirador de Lorca, es su empatia para con los más desfavorecidos y de forma especial, hacia el pueblo gitano al que siempre llevó por bandera, porque lo conocía bien y porque era el colectivo que soportaba un ambiente más hostil. Estas posiciones le condicionaron mucho en todo su entorno. A Lorca se le cuestionaba su propia honorabilidad. Su procedencia de familia acomodada, hacía que su vida fuese como la antítesis de lo que él debería de haber sido y eso me encanta. Pertenecer a una familia acomodada no significa ser una persona vacía, el ejemplo de Lorca, contradice esta teoría.
Esta atracción que siente Lorca por el flamenco y especialmente por el pueblo gitano, es recíproca. ¿ Cómo se puede explicar esta atracción mutua que no se ha dado con otros poetas”?
Lorca vivió en un contexto complejo y recibió muchas críticas por hacer odas a los desfavorecidos, al pueblo gitano, a la pobreza, a la tragedia. Lorca fue repudiado por muchos sectores, incluso Dalí y Luís Buñuel le reprocharon que hiciese odas a los gitanos porque consideraban que esto, le quitaba excelencia. No aprobaban su cercanía con un colectivo deplorable, tal y como ellos, consideraban al pueblo gitano.
Los gitanos, cada día que pasa, nos sentimos más cercanos a Federico García Lorca y acabará siendo, si no lo es ya, un patrimonio del pueblo gitano. Existen dos formas de ser gitano, la biológica por ser concebidos por la unión de un gitano y una gitana y otra es una condición, una forma de ser y pensar. Lorca, desde muy pequeño, sentía empatía con los gitanos porqué él, tenía una forma de ser muy gitana y esto me gusta remarcarlo.
Hay infinidad de gente, que forman parte de la élite cultural, social y política del país y no se paran a pensar en como vive la gente ni comprenden como hay otros pueblos, que llegan a rozar la excelencia en felicidad, de una forma natural.
La pandemia ha sido muy dura para todo el mundo pero para los artistas dedicados a la creación y transmisión del arte, tiene que haber sido especialmente dolorosa. ¿Cómo has vivido este período?
Lo he vivido con mucho estupor, no pensaba que me iba a afectar tanto en tantas áreas. Ha sido el golpe emocional más duro que he vivido en mi vida. Afortunadamente no he visto morir gente de mi ámbito familiar más cercano, pero si he visto mucha incertidumbre. Cuando no sabes lo que va a pasar y esa incertidumbre afecta a tu economía, a tus emociones y a tus sentimientos, te vas hundiendo y esto me ha llevado a una pseudo-depresión y digo pseudo porque entiendo lo que es y con mis herramientas, intento superarla pero ha sido un golpe muy duro.
España no está pensada para los artistas, siendo un país de grandes artistas. Paradójicamente España no cuida a sus artistas porque los tiene como algo muy común. Yo he estado en países donde el nivel artístico es más bien bajo, que cuidan mucho su cultura, porque entienden que la cultura es una de sus riquezas, sin embargo España, que posee tanta mezcla de culturas, parece que lo pasa por alto y no cuida a sus artistas.
Salvo cuatro o cinco nombres de estrellas mundiales, todos los músicos de a pie lo pasamos bastante mal. Recuerdo que Rodríguez Uribe, Ministro de Cultura, no contemplaba ninguna medida para proteger a los artistas durante la pandemia. Cuando un Ministro de Cultura no protege a la gente que consolida el tejido cultural de su país, demuestra que no se nos tiene muy en cuenta.
Paco de Lucía definía el Flamenco cómo una reunión. Gente del pueblo que se junta para manifestar sus penas y alegrías a través del cante, el toque y el baile. Esta percepción del flamenco más puro, de patio, a pie de calle, de familia y vecinos, continúa siendo vigente.
Debería de ser así, pero esto no significa que lo sea. He vivido muchas reuniones en los espacios post-concierto, cuando nos quedábamos en los camerinos y montábamos una fiesta, pero cada vez menos. Es un fenómeno muy sureño, quizás por el clima o por un ambiente más festivo pero es así.
Hace un tiempo, todas las manifestaciones de ocio/cultura, se disfrutaban compartiéndolas mientras que en la actualidad se consume con un individualismo increíble, todo se consume a través de un móvil, se ha perdido la sensación del acontecimiento, ya nada es un acontecimiento, nada llama suficientemente la atención como para ser un acontecimiento y en consecuencia, todo lo que se hacía colectivamente, ha menguado.
La sociedad está pensada para consumir y pienso que en todas las músicas tradicionales y viscerales, como el flamenco, cualquier momento pasado fue mejor.
Apuesto por recuperar la actividad colectiva. Es más peligroso el silencio que el ruido y la gente se obsesiona por el ruido en una ciudad mediterránea como Barcelona.
Los pueblos mediterráneos no pueden ser como los escandinavos. Me encanta Escandinavia, sobre todo para estar en casa al lado de la chimenea, pero cuando pretendes que en una ciudad mediterránea, impere el silencio, estás rompiendo un tejido cultural, una sensación de acontecimientos constantes y estás destruyendo una calidad de vida. Yo no sé como se mide la felicidad, pero cuando me pego un hartón de reír, me siento el ser más feliz del mundo y cuando disfrutas de una obra de teatro y te emocionas, lloras, tienes una enorme sensación de estar vivo. ¿Queremos parecer Suecia por su bienestar económico? pues deberíamos copiar su modelo económico con leyes fiscales y al tiempo, proteger nuestro modelo cultural mediterráneo, que es muy superior.
Hubo un tiempo en que el flamenco se asoció a un modelo de diversión de toreros, nobles y famosos y posteriormente a un producto para turistas. ¿Esto ha beneficiado o perjudicado al flamenco?
No es por una cosa ni por la otra, es por la objetividad que tiene el flamenco. Si hay algo que es puramente antidictatorial, es el flamenco. Claro que hay un sector que se jactó de las fiestas de toreros, nobles y la gente del régimen que ellos pensaban que les convenía para tener actividad, pero también hay muchos flamencos republicanos que cantaban en forma de protesta y que se la jugaron mucho.El flamenco no es de nadie, el flamenco es de los flamencos y no se puede opinar desde un solo prisma. Hay muchísima gente que reivindicó las libertades mientras estaban de moda los Hombres G.
Me gusta la pregunta porque es algo que me molesta y al mismo tiempo me enorgullece. En el flamenco hay sitio para todos, aunque yo tenga mis tendencias.
En 2010, la UNESCO declaró el Flamenco como patrimonio inmaterial de la humanidad y recientemente, en Andalucía se ha elaborado una ley de protección y difusión del flamenco. ¿Está suficientemente protegido el flamenco?
Siempre he tenido la sensación de que el flamenco debería estar más protegido. Todas las leyes que se hagan con el objetivo de proteger al flamenco, serán bien recibidas aunque todo lo relativo al flamenco debería estar contrastado con los flamencos.
No estoy descontento con esto, estoy expectante, es decir, en el cómo se va a hacer aunque en el contenido vamos a coincidir, ¿Quién verá mal que el flamenco se estudie en las escuelas?. En este país, El Ministro Wert, hizo que desapareciese la asignatura de música, el mismo Ministro expresó que los músicos no podíamos vivir únicamente de la música. Este Ministro era de un color y seguramente, el ministro actual, tendrá una visión distinta, sin embargo, deberíamos blindar unos niveles mínimos en educación y cultura, nadie nos garantiza que se respeten estos mínimos y no me gustaría que el arte flamenco se convirtiese en una artimaña política. Esto deberíamos tenerlo claro todos los flamencos, los famosos y los menos famosos.
En mi opinión, todo lo concerniente a la educación, tradiciones y cultura, deberían estar legisladas a nivel constitucional para evitar que en cada etapa política, se adapte al color de quién ostente el poder.
En Catalunya ha existido una fuerte tradición de flamenco, con la aportación de grandes artistas y actividad continuada. ¿Qué nos puedes comentar al respecto y cuál es la situación en el momento actual?
La tradición flamenca en Catalunya es real, cuando las cosas suceden pasan a ser historia y si la historia lo dice, es irrefutable. Hace unos días lo comentaba con una persona muy importante del “Taller de Músics” y le recordaba que el mayor número de actuaciones que se hacen durante el año en Catalunya, son de flamenco y esto es muy significativo. La visión de la importancia del flamenco en Catalunya, solamente la recogen las cifras. Por aquí pasa gente de todo el mundo, hay muchas actuaciones, los artistas trabajan y todo el mundo contento, pero no se ha reconocido el flamenco como parte de la tradición en Catalunya y esta es una de mis luchas.
Pau Casals me gusta muchísimo, amo su música y me emociona. Casals era un ser que se guiaba por estímulos y para mí, la gente que tiene este punto de autenticidad, es digna de admiración. Carmen Amaya también tenía esta autenticidad, era una mujer revolucionaria porque tenía una miras muy avanzadas, como mujer, gitana y catalana. Si hablamos de cultura y tradición en Catalunya, no podemos olvidar a Carmen Amaya.
Los guitarristas flamencos tenéis una técnica muy especial, que valoran sobremanera los músicos de Jazz pero queda la sensación que lo hacen desde una cierta superioridad de sus estilos. ¿Cuales son los límites del flamenco para su reconocimiento como un gran estilo universal?
¿Por qué el flamenco puede tocar con todo tipo de músicos y nos tienen en consideración?. Los flamencos podemos tocar con quién nos dé la gana porque tenemos una capacidad musical, rítmica y emotiva de tal magnitud, que podemos movernos perfectamente por emociones y por intuición. Tenemos esta peculiaridad.
En cuanto a que no se nos considere músicos de élite, es un hándicap que se produce aquí, en el extranjero no lo dudan. Tú dices que eres guitarrista flamenco y de entrada, te respetan y dan por hecho que eres un gran músico, porque es una música compleja y dentro del mundo musical, se le tiene respeto y admiración.
Es aquí donde existe este complejo. ¿Qué música es más compleja y reconocible, el flamenco o el pop español?. Con todos mis respetos para los músicos, pero es una cosa obvia. Yo creo que los mejores músicos de este país, desde Falla a Serrat, Alejandro Sanz, etc, siempre han sido muy empáticos con el flamenco.
Cuando escuchas “el Amor Brujo” de Falla y dices, suena a español, en realidad no es eso. Suena a flamenco. Es una melodía tan característica y con tanta emoción y calidad que te persigue y te influencia. Como ejemplo puedes ver la actuación de Stevie Wonder en el funeral de Michael Jackson. Hace un tema con la armonía del flamenco. Stevie quería presentar una canción que conmoviera y estuviese acorde con la solemnidad del momento, en recuerdo a este genio de la música, y pensó en la armonía del flamenco. Esto describe la calidad y el reconocimiento que tiene el flamenco.
La fusión es la incorporación al flamenco de instrumentos y lenguajes musicales procedentes de otros estilos. ¿Hasta que punto puede evolucionar el flamenco sin perder sus raíces tradicionales?
Por tener recursos que no quede. Yo esto lo extrapolo al buen orador, un buen orador tiene un lenguaje muy coloquial y conoce los mejores recursos para que todo el mundo lo entienda. Para un músico, todo recurso musical te aporta calidad, venga del clásico, del jazz, de donde venga. Conocer otros lenguajes hace que tu música sea más rica, siempre que todo funcione a través de la emoción, del corazón. Insisto, esto es como el buen orador, tu lenguaje tiene que llegar rápido, emocionar, de una forma cotidiana y potente.
La guitarra flamenca alcanzó su máximo esplendor con Paco de Lucía y su figura parece irrepetible. ¿Ves posible que la guitarra flamenca llegue a recuperar el nivel que dejó el Maestro Paco de Lucía?
No y tampoco me interesa, Yo no quiero más, para mí, con Paco se acabó. Todo lo que venga después de Paco de Lucía me parecerá interesante, pero no admite comparación con Paco. No estoy hablando de desvirtuar ni de desprestigiar a los guitarristas actuales, simplemente digo que lo que hizo Paco de Lucía, está tan adelantado a su tiempo que todavía no estamos en la calidad y en las condiciones musicales de entender lo que este hombre hizo y esto pasa en muy pocas profesiones.
Lo de Camarón y Paco fue extraordinario, dos personas que hicieron de un género, un subgénero. Engrandecieron el flamenco a tal nivel, que crearon un nuevo género cuyo origen es el flamenco. Más de uno se tirará de los pelos y sin embargo, yo lo veo así.
No me interesa que salga alguien parecido a Paco de Lucía porque sería una revolución que yo ya no iba a entender.
En un momento de músicas globales, plataformas globales, artistas globales, producciones globales…¿estamos perdiendo la esencia cultural de los pueblos y de las clases más desfavorecidas?
Si, rotundamente si. Nosotros cuando hablamos de protección lo hacemos a nivel colectivo, nunca individual. La protección de la cultura ha de ser en el ámbito de pueblo y prácticamente de barrio. Las características culturales de cada barrio, se deben proteger porque las tradiciones nos dan una identidad y un carácter que puede perdurar a lo largo de muchísimos años, de una forma intacta porque no es nada físico, es algo emotivo y colectivo.
En el flamenco somos muy localistas, muy de barrio. La manera de cantar por bulerías de un barrio de Jerez, cambia con respecto a otro barrio de Jerez. No están zumbados, es puro recelo artístico, respeto a lo recibido y pasión por el arte.
¿Cómo ves la era digital en relación a las formas tradicionales de cultura popular?
Hemos ido mucho más rápido deshumanizándonos que creando un mundo mejor para los seres humanos. Lo más importante era que el ser humano fuese el centro de todo y posteriormente la creación de máquinas para hacer las tareas que no pudiesen hacer los humanos. Lo hicimos todo al revés.El ser humano ha cometido dos errores gravísimos, la Revolución Industrial y la digitalización, porque abrimos la puerta a que las personas no sirvamos para nada y por lo tanto, a ser prescindibles. Si el ser humano es prescindible, todo lo que sacia el espíritu de las personas, la cultura, también es prescindible.
En los últimos años, la cultura se ha utilizado más como algo que ofrecer y manejar políticamente, que una realidad al servicio de una humanidad más libre. No creo que la cultura sea un bastión de la sociedad en la era moderna.
La música se ha convertido en algo elitista, en un producto. En la era digital se están haciendo discos con sonidos virtuales, aplicaciones que sintetizan golpes virtuales de percusión en espacios precisos y sinceramente… nos vamos a la mierda. En el cine, pasa algo parecido, era un espacio abierto a la crítica social y se ha convertido en un canal de difusión de una forma de pensar muy concreta. Llamadme catastrofista pero yo lo veo así.